header-photo

QUE GANAS CON ECHARME DE TU LADO

Que ganas con echarme de tu vida,
Si mi amor no te estorbaba, no te inquietaba,
Era algo menos que una sombra
Disminuido en cada suspiro.

Yo vivía feliz en tus desdenes,
En tus sitios oscuros que nadie visita;
En tus corajes de madrugada, también de tarde
En la charla siempre interrumpida y relegada.

Nunca pedí un espacio,
Ni quise ser ese suspiro, que entraba como huracán,
Nunca pedí ser el brillo nuevo en tus ojos
Ni, el sabor a deseo de tus labios.

Siempre estuve contento en el baúl, como muñeco
De titiritero, esperando mi función, mi salida,
Mi noche de gala.

Siempre estuve feliz,
Con una charla cada ocho meses y luego, una ruptura
De nuevo un encuentro y otro desencuentro.

Siempre me conforme con lo mínimo,
Con una mirada, una carta, la mitad de un poema
Con algún paseo, con tus limosnas de amor,
Con la vivencia de mís versos.

Ahora que me echas de tu vida,
Siento que me mata la nada.
Siento que acaba lo que nunca tuve;
Que se termina lo no comenzado.

Y queda la pregunta
¿Porque me echas de tu vida?
Si nunca te molesté, siempre fui nada?
Nunca estuve, ni existí
¿Porque?


LENNOX